Guía práctica de “A Tus Órdenes” (Neville Goddard)
Todos los ejercicios extraídos del texto original, con ejemplos y pasos fieles a lo que Neville enseñó.
Esta publicación reúne todos los ejercicios prácticos que Neville Goddard enseñó a lo largo de su primer libro, A Tus Órdenes (1939). No son técnicas modernas ni interpretaciones ajenas, sino prácticas fieles a sus propias palabras, tal como él las expresó.
He creado este espacio como parte de mi estudio personal. Al traducir y condensar cada ejercicio, mi intención es poder volver a ellos con más claridad, tenerlos a mano cuando me sienta perdida, cuando necesite recordar quién soy o desde dónde quiero vivir. Si tú también estás en este camino, puede que te resulte útil.
Aquí encontrarás los ejercicios organizados según el orden en que aparecen en el libro. Cada uno incluye la frase original que Neville usó, el gesto interno que proponía, y la transformación de conciencia que busca despertar.
No hace falta hacerlos todos de golpe. Puedes elegir uno, practicarlo a tu ritmo, observar qué cambia dentro de ti… y volver cuando lo necesites.
🟠 Este trabajo no es un método para controlar la realidad externa, sino un modo de habitar con más conciencia la realidad interna desde la cual todo se origina.
Bienvenid@ a esta práctica.
Bienvenid@ a este entrenamiento de la conciencia.
✦ Ejercicio 1 – Decretar en conciencia
📜 Frase clave del capítulo:
“No decretas cosas mediante tus palabras o afirmaciones en voz alta… El decreto siempre se realiza en la conciencia.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
Neville explica que el decreto no se hace con palabras habladas, sino con la conciencia de ser. El hombre no afirma su realidad a través de repeticiones en voz alta, sino por lo que interiormente sabe que es. Por eso, incluso un hombre mudo puede decretar, porque lo hace desde su estado de conciencia.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
Detén el impulso de declarar en voz alta.
No repitas frases esperando que el sonido haga efecto.
Reconoce que el decreto ocurre en el silencio de tu ser interior.Siéntate en quietud y reconoce tu ser.
Sin definir nada todavía, solo reconoce: “Yo soy”.
Este es el punto de partida de toda creación.Observa lo que estás siendo consciente de ser.
Pregúntate con honestidad:
— ¿Qué estoy afirmando ser, aunque no lo diga en voz alta?
— ¿Estoy siendo pobre, pequeño, miedoso, limitado?Suelta esa concepción y elige conscientemente un nuevo estado.
Reclama en conciencia:
— “Yo soy libre.”
— “Yo soy paz.”
— “Yo soy uno con mi deseo.”Permanece ahí.
No hagas más.
Decretar no es una acción externa, es el acto de asumir en conciencia.
✨ Clave interna
“El hombre siempre se encarcela a sí mismo o se libera a sí mismo.”
Este primer ejercicio sienta la base de todo lo que sigue.
Comprender y practicar el verdadero acto de decretar en conciencia es el primer paso hacia la transformación interior.
No hay necesidad de esfuerzo, ni visualización compleja.
Solo un cambio silencioso de identidad, asumido como verdadero.
← Puedes regresar al capítulo en cualquier momento para profundizar en sus palabras: Parte 1 – ¿Puede el hombre decretar algo y hacerlo realidad?
✦ Ejercicio 2 – Decretar correctamente en conciencia
📜 Frase clave del capítulo:
“Decretarás algo y se cumplirá.”
“No decretas con palabras ni en voz alta… sino al elevarte en conciencia a aquello que deseas ser.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
Neville revela que el verdadero decreto es elevarse en conciencia hasta sentirse ser aquello que se desea, no pedir ni suplicar a un Dios externo.
El decreto sucede en secreto, en el interior, en unidad con el deseo, tal como lo expresa a través del símbolo de María y el Verbo.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
Reconoce que el decreto es un acto interno, no una súplica.
No es repetir frases en voz alta, ni visualizar compulsivamente.
Es un acto de unión interna con lo deseado.Cierra la puerta de los sentidos.
Siéntate en quietud y deja de observar lo que tus sentidos te muestran (deuda, enfermedad, soledad).
Ignóralo sin lucha.Declara en conciencia: “Yo soy eso que deseo.”
No con palabras, sino con sentimiento.
Si deseas salud, siente la paz, ligereza y fuerza del cuerpo saludable.Alcanza la naturalidad.
Permanece en este estado hasta que se sienta tan real y natural como si ya lo hubieras vivido.
No fuerces. Solo siente como sería ser eso que anhelas.No lo compartas.
Como en la historia de María, “ve y no lo cuentes a nadie”.
Otros pueden reforzar tus dudas actuales.Magnifica al Señor.
Revaloriza tu identidad. Amplía tu autoimagen hasta que se ajuste al estado que deseas.
Si antes te sentías incapaz, expándete internamente hasta que la riqueza, la salud o el amor te parezcan naturales.Permanece unido a tu deseo.
El Verbo (el deseo) estaba con Dios (tu conciencia).
Al decir “Yo soy saludable”, haces un acuerdo interno entre conciencia y deseo, y eso da fruto.
✨ Clave interna
“YO SOY y lo que deseo deben hacerse uno.”
“Decretarás algo y se cumplirá.”
El decreto no es pedir que algo suceda:
es establecer en secreto la unión con lo deseado.
Una vez que sientas “yo soy eso”, lo demás será añadido.
← ¿Te gustaría volver al capítulo y releerlo con una nueva comprensión? Parte 2 – La verdadera forma de decretar
✦ Ejercicio 3 – Dejar atrás tu viejo yo y asumir la conciencia deseada
📜 Frase clave del capítulo:
“No puedes llevar contigo al nuevo estado de conciencia ninguna parte del viejo hombre.”
“Para trascender estas limitaciones… debes fundirte en la sensación de ser aquello que deseas.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
Neville insiste en que para manifestar una nueva realidad, no basta con desearla: hay que nacer a ella. Eso implica morir a tu concepto anterior, a tu antigua identidad.
No puedes mezclar el viejo yo con la nueva conciencia.
Este capítulo enseña cómo abandonar las limitaciones personales y sumergirte en la expansión impersonal del “Yo Soy”, sin nombre, sin forma… hasta asumir por completo el estado deseado.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
Reconoce que no puedes cargar tu vieja identidad.
Todos tus miedos, hábitos, dudas y “historias personales” deben soltarse.
No puedes avanzar mientras sigues creyendo que eres una “langosta” (como en el ejemplo bíblico que Neville cita).Aparta tu atención del problema.
Ya no luches contra lo que “te limita”.
Déjalo sin resistir, sin analizar.
Tu foco ya no estará ahí.Entra en el simple acto de ser.
Siéntate en silencio y repite solo: “Yo Soy.”
No le agregues nada.
Quédate en esa expansión sin forma, sin nombre, sin rostro, hasta que sientas que no eres nadie y, a la vez, puedes serlo todo.Desde ese espacio sin forma, concíbete como lo deseado.
Permite que el nuevo estado te impregne.
No lo “pienses”. Siéntelo como verdad interna.
Es en esa profundidad donde concibes la nueva imagen que nacerá como manifestación.Reconócete como “la voz que clama en el desierto”.
Lo que declares ser en conciencia —aunque sea invisible hoy—
vendrá a ti, porque no puedes dejar de encontrar aquello que estás convencido de ser.Abre la puerta.
El deseo toca tu conciencia.
Si lo sientes como natural, has abierto la puerta.
Si lo rechazas o crees que es imposible, la has cerrado.
✨ Clave interna
“Todo lo que ves en tu mundo es tu conciencia proyectada.”
“Tu entorno no cambia destruyendo las cosas, sino cambiando lo que eres en conciencia.”
Este ejercicio enseña la muerte del viejo yo y el nacimiento del nuevo, no como teoría sino como una práctica:
soltar la vieja historia, entrar en la inmensidad del Yo Soy y desde ahí, asumir con certeza tu nueva identidad.
← Puedes regresar al capítulo en cualquier momento para profundizar en sus palabras: Parte 3 – Dejar atrás el viejo yo y asumir el nuevo
✦ Ejercicio 4 – Pedir en Su nombre y diezmar con conciencia
📜 Frases clave del capítulo:
“Cuando entras en el gozo del agradecimiento… te has hecho uno en conciencia con la cosa.”
“Pedir en el nombre es elevarse en conciencia y hacerse uno en naturaleza con la cosa deseada.”
“YO SOY el Señor. Tu conciencia es el Dios al que das.”
“De ahora en adelante, da al único Dios la cualidad que deseas expresar.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
En esta parte, Neville enseña que el acto de pedir correctamente no es rogar ni formular frases mágicas, sino elevar tu conciencia hasta ser uno con lo deseado.
El “nombre” de Dios no es una palabra hablada: es la naturaleza.
También enseña que el agradecimiento verdadero es la señal de que ya te has unido al deseo. Y que el diezmo no es dinero, sino dar a tu conciencia una cualidad con fe plena en su cumplimiento.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
Libérate del deseo de pronunciar palabras mágicas.
Pedir “en Su nombre” no significa repetir “Dios”, “Jesús” o “Padre” en voz alta.
Significa convertirte en eso que deseas, en conciencia.Hazte uno con la naturaleza de lo deseado.
Si quieres amor, siéntete amoroso.
Si deseas abundancia, asume la conciencia de prosperidad.
Hazlo desde dentro, como si ya vivieras en ese estado.Entra en gratitud profunda.
Cuando puedas decir internamente: “Gracias, Padre”, no como fórmula sino como certeza,
significa que ya te has unido en conciencia a lo que deseas.Perdona antes de meditar.
Si guardas resentimientos o juicios contra otros, no puedes elevarte en conciencia.
Libera mentalmente a todos:
— “Los dejo ir. No los condeno.”
Hazlo por ti, para poder acceder a un nivel más alto.Comprende el verdadero diezmo.
El diezmo no es dinero. Es la cualidad que entregas a tu conciencia.
Cada vez que declaras: “Yo soy fuerte”, “Yo soy libre”, “Yo soy sabio”, estás diezmando.Declara con convicción.
Reclama cualidades elevadas hasta que las sientas como tuyas.
No especules sobre cómo se manifestarán. La vida tiene caminos que tú no conoces.Permanece en silencio y certeza.
Lo que se establece en secreto será proclamado desde las azoteas.
Tus convicciones ocultas se harán visibles como hechos externos.
✨ Clave interna
“Pedir en Su nombre es hacerse uno con la naturaleza de la cosa deseada.”
“Tus palabras internas son espíritu. No volverán vacías.”
Este ejercicio reúne tres llaves prácticas:
• La unión silenciosa con lo deseado.
• El perdón como limpieza de la conciencia.
• El decreto como acto de ofrenda interior.
Cuando das a tu conciencia la cualidad que deseas vivir, le estás diezmando al único Dios verdadero: tu Yo Soy.
← ¿Te gustaría volver al capítulo y releerlo con una nueva comprensión? Parte 4 – Pedir en su Nombre y el Verdadero Diezmo
✦ Ejercicio 5 – El poder de la autodefinición: “YO SOY Él”
📜 Frases clave del capítulo:
“¿Quién decís que YO SOY?”
“Reclámate a ti mismo como la cosa deseada. Reclámalo en la conciencia — no con palabras.”
“Tú crees en un Dios, cree también en MÍ.”
“Sigue el ejemplo del hijo pródigo… y toma la decisión dentro de ti de elevarte a un nivel más alto.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
Neville muestra que la única manera de resolver un problema es dejar de alimentarlo con atención y asumir la conciencia de su solución.
Esa solución se alcanza al declarar en silencio: “YO SOY Él”, es decir, reconocerte como uno con tu deseo cumplido.
El salvador que buscas (libertad, salud, riqueza) no está fuera: eres tú, cuando asumes el estado correspondiente en conciencia.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
Identifica lo que deseas ser.
¿Quieres salud, libertad, abundancia, amor?
El deseo es la señal de que el “YO” dentro de ti llama a la puerta.Apaga tu atención del problema.
No sigas mirando tus limitaciones: deudas, síntomas, carencias.
Retira tu atención.
No luches. Solo déjalos de lado con serenidad.Declara en silencio: “YO SOY Él.”
No digas “quiero salud”, sino “Yo soy salud.”
No repitas con palabras. Siente en el fondo de ti: “Yo soy eso que deseo.”
Hazlo hasta que se vuelva natural.Siente que ya lo eres.
El momento de sanación, libertad o éxito llega cuando tocas la conciencia de ser eso.
Lo sabes porque sientes una certeza pacífica y firme.
Como dice Neville: “Virtudes saldrán de ti.”No confíes en el reflejo externo.
No pongas tu fe en lo que los demás dicen o en lo que ves.
Recuerda: los hombres no pueden darte más de lo que tú mismo te has dado primero en conciencia.Confía en que la conciencia es el único constructor.
Si no estableces el estado deseado en tu conciencia, todo esfuerzo será en vano.
Como dice Neville: “El Señor no destruye nada: solo llena el molde que tú le entregas.”Sigue el ejemplo del hijo pródigo.
Reconoce que tú causaste tu estado actual y decide elevarte.
Reclama internamente el anillo, el manto y el becerro: los símbolos de la abundancia y restauración.
✨ Clave interna
“YO SOY Él.”
“Tú crees en un Dios, cree también en MÍ.”
Todo deseo es una puerta.
Cuando lo sientes como natural y verdadero, has abierto esa puerta, y el deseo entra en tu mundo como forma.
Este ejercicio no es afirmación externa, sino transformación silenciosa desde el ser.
La conciencia no destruye tus circunstancias: simplemente las sustituye al asumir nuevas formas.
← Puedes regresar al capítulo en cualquier momento para profundizar en sus palabras: Parte 5 – La Vid y los Sarmientos: El Poder de la Autodefinición
✦ Ejercicio 6 – Fe, gratitud y creación consciente
📜 Frases clave del capítulo:
“No condiciones tu deseo. Simplemente acéptalo como llega.”
“Reconoce la alegría, aunque sea pequeña.”
“Repite: ‘Yo Soy, Yo Soy, Yo Soy’… y sin aviso soltarás el ancla que te ata a la orilla de tus problemas.”
🔸 ¿Qué enseña Neville?
Neville cierra este libro revelando cómo pescar en las aguas profundas de la conciencia para materializar nuestros deseos.
Insiste en que el deseo no debe condicionarse ni analizarse, sino aceptarse como don divino y plantarse en conciencia con fe y gratitud.
También nos recuerda que el reconocimiento interno de lo que ya somos es el poder que convoca.
🔸 Paso a paso para practicar este ejercicio
1. Reconoce el deseo como promesa de Dios
No lo rechaces, no lo cuestiones.
El deseo ya trae en sí su plan de realización.
Acéptalo como palabra de Dios.
2. No lo condiciones.
No pienses: “¿Soy digno?” o “¿Y si está mal querer esto?”
Acepta el deseo en su forma pura.
No le impongas “cómo” debería suceder.
3. Da gracias como si ya lo hubieras recibido.
No basta con pensarlo.
Siente la alegría de la gratitud como la viuda que vertió el aceite sin dudar.
4. Aparta tu atención de las apariencias.
Si estás enfermo, en deuda o atrapado en un problema, no mires más eso.
Dale la espalda como Daniel a los leones.
Tu atención es la savia que sostiene el problema.
5. Repite: “YO SOY… YO SOY… YO SOY.”
No definas al principio lo que eres.
Solo quédate en ese estado de ser.
Sin previo aviso, sentirás una expansión interna.
Ese es el estado profundo donde los deseos pueden habitar.
6. Hazte uno con la naturaleza de lo deseado.
— “YO SOY rico.”
— “YO SOY libre.”
— “YO SOY fuerte.”
Fíjate en estos sentimientos sin necesidad de pruebas externas.
7. Permanece en la quietud de esta nueva identidad.
No salgas a buscar.
Quédate en esa conciencia como quien planta una semilla y confía.
8. Reconoce incluso el más pequeño inicio de cambio.
Como la viuda que no despreció tres gotas de aceite,
honra cada paso de fe con gratitud y persistencia.
✨ Clave interna
“Tu conciencia es el Señor tu Dios.”
“Decreta que lo no visto aparezca… y aparecerá.”
“Todas las cosas están obligadas a responder a la Voz de Dios, tu conciencia de ser.”
Este capítulo final reúne todos los principios anteriores en una práctica de creación consciente:
• Reconocimiento.
• Aceptación del deseo.
• Atención apartada de lo indeseado.
• Gratitud como confirmación.
• Unidad con el estado deseado.
Tu conciencia no necesita pedir.
Solo decreta en silencio desde el Yo Soy, y lo invisible vendrá a ti.
← ¿Te gustaría volver al capítulo y releerlo con una nueva comprensión? Parte 6 – Fe, Gratitud y Creación Consciente
Cada uno de estos ejercicios es una puerta interior. Neville, en este libro, transmite que no hay reglas rígidas, solo una guía para entrar en comunión con nuestro verdadero ser.
Yo soy la primera que va a poner en práctica estas enseñanzas. Las he traducido con el deseo de comprenderlas mejor, de vivir desde ellas, de dejar atrás el viejo estado de duda y empezar a asumir que lo divino ya habita en mí.
Quizás tú también estás en ese punto: queriendo pasar de la teoría a la experiencia, de la lectura a la transformación.
Si algo de lo que encuentras aquí te ayuda, aunque sea un poco, a recordar tu poder, a asumir una nueva conciencia, o a caminar con más claridad, me alegrará mucho saberlo.
💬 Te invito a compartir en los comentarios lo que vayas viviendo: tus inquietudes, resistencias, logros o comprensiones. Este espacio es para eso. Para acompañarnos. Para expandirnos juntos.
✦ Porque no estamos solos en este proceso.
✦ Porque cuando uno despierta, inspira a otros a despertar también.
✦ Porque todo se multiplica cuando lo compartimos desde el corazón.
Gracias por ser parte de La Mente Creadora.
Seguimos caminando. Seguimos creando.
Indira ✨







